4 consejos para enseñar a los niños a ser amables

Ser amable es una habilidad importante, tanto para los niños como para los adultos. Hemos presentado los beneficios de la amabilidad en otra entrada de blog. Es un concepto bastante amplio. El diccionario define la amabilidad como “el acto de ser amable, generoso, o considerado”. Esta definición abarca muchas cosas. Así que el simple hecho de decirles a los niños que “sean amables” no les enseña cómo hacerlo. Aquí presentamos 4 pasos concretos para ayudar a enseñar a los niños a ser amables.

  • Hable acerca de lo que quiere decir ser amable. Para poder ser amable, su niño o niña necesita ejemplos de lo que quiere decir. Podría decirle algo como, “¿Ves que tu amiga lleva puesto una camiseta de rayos divertido? Sería amable decirle que su camiseta es linda.” O podría notar cómo se siente alguien, “Tu compañero está llorando. Me pregunto si está triste porque no tiene crayolas. Sería amable compartir tus crayolas con él.”  Y es importante señalar cuando alguien le haya sido amable con su niño/a. Por ejemplo, “Aracely acaba de compartir su galleta contigo. Ella fue muy amable.” También puede resaltarlo cuando los personajes de los libros o videos están siendo amables. Entre más ejemplos tenga, mejor podrá aprender las muchas maneras posibles de ser amable.
  • Hable acerca de cómo se siente uno cuando alguien le es amable.  Cuando sabemos que estamos ayudando al próximo a sentirse bien, nosotros también nos sentimos bien, y se vuelve más probable que seamos amables en el futuro. Explique a su niño/a cómo se siente cuando alguien es amable. Podría decir algo como, “estuve un poquito triste esta mañana y mi amiga me dijo que le gustaba mi suéter. Eso fue amable y me hizo sentir más feliz”. También puede preguntarle a su niño/a cómo se siente cuando alguien le es amable. Explíquele que cuando él o ella es amable, se vuelve más probable que otros sean amables consigo.
  • Dense cuenta de la gente a su alrededor. Si no estamos prestando atención a lo que pasa con los demás, a lo mejor no se nos ocurrirá pensar en cómo ser amable. Esto se puede lograr con libros de cuentos ilustrados, videos, incluso con personas de verdad. Por ejemplo, si están leyendo un libro y uno de los personajes está riéndose, podría preguntar, ¿“Cómo cree que se siente?” También podrían observar a la gente cuando están en la calle. El notar los detalles pequeños puede ser divertido. Por ejemplo, podría señalar que alguien lleva puesto un abrigo azul o está caminando con un perro pequeño. (Aproveche esta oportunidad de practicar nuevo vocabulario al describir las figuras, los colores, y tantas cosas más.)
  • Reconozca los actos de amabilidad de su niño/a. Cuando le ve a su niño o niña siendo amable, déjelo/a saber que lo vio y que lo aprecia. Es importante nombrar lo que vio para que su niño/a sepa cómo hacerlo otra vez. Entonces, si acaba de compartir su juguete con una amiga, puede decir, “Cuando dejaste que tu amiga usara tu juguete, estuviste super amable. ¡Bien hecho!” o si le ayudó de alguna manera, diga, “Gracias por ayudarme. Fuiste muy amable y eso me hizo sentir bien.”

Ser amable se nos hace bien a todos y puede ayudar a que su niño/a a triunfe en la escuela (y en la vida también).

[divider type=”standard” text=”Go to top” full_width=”no” width=”1/1″ el_position=”first last”]

Text: © Kids In Transition to School

Image: © Johnathon Novak | Dreamstime.com

Facebook
Twitter
LinkedIn
Email
Print
WhatsApp

More Content to Explore ...